Semana trágica para fútbol gaucho
Bien lo refería el crítico peruano Puigross Planas cuando decía que los organizadores de los dos eventos más importantes del balompié sudamericano, en su mayoría argentinos, hacían y deshacían con la copa Toyota Libertadores y la Sudamericana y, que se consideraban superiores a todos los equipos , salvo los brasileños . También, que cuando perdían, salían a relucir su habitual piconería y mil excusas.
Pero, ahora el tiro le salió por la culata y de qué manera.
San Lorenzo venía de ganarle en Uruguay al River y sólo necesitaba un gol para clasificar. Finalmente, subestimando al rival, fueron eliminados por penales y su entrenador, Simeone, no sabía qué decir del fracaso y del llanto de Tinelli por dentro.
Vélez iba por el triunfo en Ecuador ante LDU de Quito y en el primer tiempo ganaba 1-O. Pero, en el segundo tiempo, LDU le dio vuelta al marcador con dos goles de Vera y Spínola eliminándolos. Hay que ver como el periodista Niembro intentaba que ambos jugadores reconocieran que debieron ser expulsados por patear a dos del Vélez. Increíble.
El sub 17 de Argentina ganaba 2-0 a Colombia en los octavos del mundial de la categoría en Nigeria, pero, tiempo después, Colombia volteó el marcador y lo eliminó de los cuartos. Los periodistas argentinos calificaron el triunfo de hazaña y lo peor, justificaron la derrota por la expulsión de un argentino y hasta metieron a Brasil, en su dolor señalando que, el eterno rival , había sido eliminado, en primera ronda.
Un poco de humildad, señores.
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