RARO ; LA ÚLTIMA NOVELUCHA BAZOFIA DE RENATO CISNEROS

Las mismas barrabasadas de alguien que, como escritor es buen corrector de textos. "Raro", la última novela de  Renato Cisneros, no es más que 250 y tantas páginas de pura bazofia. Una historia estúpida; las andanzas de un veinteañero  que no sabe que hacer con su vida de purser, que sufre decepciones pero  que puede follar a sus ex amigas, que  quiere escribir una novela de vampiros y   conoce a un amigo editor que es como su senseí y quien se suicida.
Más que un escritor, Cisneros  imita y mal la retórica  costumbrista de Reynoso, Bayly y Roncagliolo al 2012.  El lugar común del taxista que sabe de política y al que se odia por la música  que emite en el  auto;  el lugar común  del peor  Holden Caudfield 2012, el lugar común de ir a Barranco a probar un cebiche, el lugar común del pendejito que folla  a la amiga que no ve de años, el lugar común de un lenguaje peor que el del Pico de  Trome.
Se dice que la novela se hizo por entregas y que, supuestamente, era para que el público la siga . Debió haberse quedado  en  la Internet, perdido entre tanto spam y lotería.
 Porque  cuesta creer que el hijo del gaucho, el sobrino de la eminencia  Luis  Jaime,  no tenga argumentos para un lenguaje más poético. Para hacer novelas como las de Reinaldo Arenas, por lo menos, y siga con las mismas burradas de cuando escribía en el Deporte Total de El Comercio, un asco.

 Allá los y las  fans que tiene  en la web y  en su radio Oxigeno, quienes  le hacen un mal al pobre elogiándolo  y  que  va de caida en caida,  desde que salió, sin gloria ni pena  en El Comercio. Recuérdese como cerró su página de Juventud que tenía a su cargo, cómo fracaso en ese programa para el olvido y  absurdo llamado Sin vueltas de Rpp y cómo, él mismo  reconoce  que  no se siente a gusto en Oxígeno y va  camino a claudicar y solo  pagar sus gastos de soltero treintañero  fungiendo  como busto parlante del noticiero a las  ocho  junto a la  periodista Aliaga, que al menos tiene más cancha.
En una  parte de la novela se  lee . "Raro buscó un lugar discreto donde sentarse a llorar". Y  yo me pregunto necesariamente tiene que ser discreto un lugar para descargar la lágrima porqué no un lugar inmundo o el  WC.
Esta y otras memeces  puede hallarlas en este librucho de porquería que se encuentra a  nueve soles en su versión pirata en el centro de Lima. Un ahorro para recargar el celular y no gastar tanto en un libro  intrascendente y cuyos dibujitos  son horrorosos, hasta para un niño de cinco años.

Nota del redactor: Hinchas y no hinchas de Cisneros, dejen de argumentar que lo critico por envidia o que deseo conducir un programa. El tipo tiene para haecr muchas cosas interesantes, pero lastimosamente se queda en lo banal.