Adios al sueño de cocinar al Santos de Neymar
Horas antes de empezado el cotejo, Niembro y compañía de Fox TV ya hablaban de una final entre Barcelona de España y Vélez. Incluso decían que el once dirigido por Careca era el mejor de los cuatro finalistas de la Copa Libertadores. Ya se veían en el Morumbi cocinando a los de Santos.
Nada de eso ocurrió. Peñarol de Uruguay eliminó a Vélez en Liniers, pese a perder 2-1 en el global. Un tanto del visitante Mier enmudeció a los de Linier. Tobio empató para los locales y en el segundo tiempo, tras perdérsela Olivera de los charrúas, Silva marcó e ilusionó a la casa, pero falló un penal decisivo y el sueño se acabó.
Después todo fue llanto y dolor del, como decía Niembro, ” mejor equipo de la Argentina en la actualidad”.
Justa eliminación de un Vélez que esta vez no tuvo al frente un impresentable Caracas de Venezuela, la Liga Deportivo Universitaria colmada de lentos jugadores, el Libertad de un nervioso arquero Tobías Vargas y un lento defensa colombiano llamado Portocarrero; el once de Careca - que empujó al defensa peruano Javier Chirinos permitiendo que Pasculli elimine a Perú de México 86- se las vio con un Peñarol dirigido por Diego Aguirre que no luce pero mete como el viejo Darío Rodríguez y que es la misma garra uruguaya que conquistó el cuarto mundial en Sudáfrica 2010.
Ahora sólo le queda a Ricardo Careca, ganar el campeonato Clausura de consuelo y a Peñarol, la gloria de alzar la copa frente al Santos de Neymar. No llores por mí, Argentina.
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