Tras ser uno de los elegidos para representarnos en la feria de Guadalajara , el seudoescritor Kikin Planas Ravenna, acaba de abrir su tallerfloro en la Católica. Se dice que es un taller de escritura creativa, pero quién demonios me a segura que es tan interesante como los que dictó John Gardner o se dicta en los Unites, Cuba o la Argentina de Borges.
¿ Qué de bueno tiene calentar l a banca en su taller de la calle Esquilache en San Isidro cuando el tipo escribe hasta el queso, hasta las patas?
¿ Será porque escribe en El Comercio ?
¿ Será porque sus novelitas Alrededor de Alicia y Orquideas del paraiso son obras memorables?
¿ Será porque es renovador en la dramaturgia o letras actuales de este país ?
Nada más controvertido y cuestionable para alguien que ni siquiera tiene la chispa de Beto Ortiz, los personajes de Alarcón o siquiera la audacia de Rodolfo Ibarra
Si hay algo de utilidad será solo para que te agregue en el facebook o te consiga chamba en alguna editorial -si es que puede- o por una foto para que te luzcas en casa y digas que te fotografiaste con un periodista de El Comercio; porque para considerarlo escritor resulta arbitrario.
Su columnita sabatina más o menos se defiende en medio de los avisos ; e s lo único que vale la pena leer, pues como escritor es aburrido.
Votar 250 soles por su floro barato en momentos que el pollo está 8 50 soles es un desperdicio, salvo que te asegure que, con sus consejos, vas a ganar el cuento de las mil palabras de Caretas o el Copé de novela.
Pero eso está más verde que el amazonas.
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