El Día Internacional del Libro ha agarrado en déficit a nuestra industrial editorial peruana y la Cámara Peruana del Libro por la pandemia del Covid-19. Si antes la industria intentaba cerrar en azul con algunos exitosos programas de venta de libros como los de 9.90 soles , hoy al ser un articulo que no se considera de primera necesidad ha obligado el cierre de librerias y ferias y locales como La Casa de la Literatura y la suspensión perfecta de algunos trabajadores para no irse a la quiebra por falta de plata. Qué terrible.
Imagen :Google
Aùn recuerdo cada mes de abril que era propicio visitar algunas librerías para comprar libros en mitad de precio como los de Editorial Anagrama y otros. Se realizaban algunas ferias y presentaciones de libros. Otras como las del libro usado de Amazonas se llenaba de asistentes desde niños , adultos y adultos mayores .
Pero hoy ante este maldito virus de Wuhan, las cosas han cambiado y eso es el comienzo. Ante la prohibición de reuniones, protocolos de distancia ; la industria editorial peruana está, como los de Uci, agonizando.
Para el editor Lasso Partido de Estruendomudo, este virus ha colapsado aun mas su editorial estimando perdidas en ventas y lo mas triste: el posible fantasma de una suspensión perfecta ante la ausencia de billete y la quiebra del negocio.
En tanto Willy del Pozo de Editorial Altazor y presidente de la Camara Peruana del Libro ha visto mermado sus planes , sobre todo la Feria internacional del libro que tenia previsto en Julio y empleaba a editores, autores y tantos otros . Sobre este acontecimiento libresco, Pozo ha dado la alternativa que se podría realizar de forma virtual y con un costo tipo per for view , pero es una interrogante si la gente va a responder del mismo modo que lo presencial. Ante ello ha sido sincero y estimado que va a ver una perdida del 50 % a comparación del año pasado.
Si bien la opción de delivery es la única forma d e alternativa para no despedir gente y quebrar las raquíticas editoriales pequeñas y complicar a las grandes, aun no se sabe que tan efectiva puede ser, en general y no lleve solo migajas.
El panorama es oscuro pese al apoyo del estado. Y peor aun cuando existe el fin del año escolar presencial en los colegios públicos y las quejas de los padres de familia por las clases virtuales. El plan lector era un gancho , un botín preciado por todas las editoriales .Botín que a medida que la pandemia arrasa pulmones, se aleja poco a poco de manos de los editores por este quiebre escolar y obliga a un replanteo de las finanzas.
Lastima para todos. Editores, autores, empleados, correctores. Porque valgan verdades y, ante la multa , el uso de mascarillas obliga a reducir la compra de libros y priorizarlos por equipos de protección personal y aseo.
Al menos, supe comprar a futuro y aun tengo mucho que leer . O Lazo partido, Pozo, Penguim, Alfaguara, y la jefa de los libros mas pequeños del mundo, cambian de estrategia o van a seguir sufriendo las consecuencias de este virus que solo la vacuna salvará del cierre de sus sucursales.
Nota.
La suspensión perfecta es una medida laboral que busca proteger el puesto del trabajador pero a costa de no remunerarlo por un periodo de tres meses , tras los cuales volvería a su labor.
Sobreviviendo de su compensación de tiempo de servicio o si no es participe de ella de un bono de 760 soles otorgado por el Gobierno durante esos meses de para.
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